El PNUD en su Informe Regional de Desarrollo Humano 2013-2014. Seguridad Ciudadana con rostro humano: diagnóstico y propuestas para América Latina, propone un grupo de 10 medidas contra las amenazas a la seguridad pública, urgiendo a que se instrumenten en el corto plazo, enfatiza también en respuestas a largo plazo, como: reformas a las instituciones de seguridad y procuración de justicia, y la alineación de esfuerzos entre los niveles local, nacional e internacional. Recalca que las medidas implican una construcción incluyente de la seguridad ciudadana poniendo como eje a: jóvenes, mujeres y víctimas de la violencia y el delito. Las medidas recomendadas son:
- Alinear los esfuerzos nacionales para reducir el delito y la violencia, con base en las experiencias y lecciones aprendidas.
- Generar políticas públicas orientadas a proteger a las personas más afectadas por la violencia y el delito.
- Prevenir el delito y la violencia, impulsando un crecimiento incluyente, equitativo y con calidad.
- Disminuir la impunidad mediante el fortalecimiento de las instituciones de seguridad y justicia, con respeto a los derechos humanos.
- Potenciar la participación activa de la sociedad, especialmente de las comunidades locales, en la construcción de la seguridad ciudadana.
- Incrementar las oportunidades reales de desarrollo humano para los jóvenes.
- Atender y prevenir de modo integral la violencia de género en el espacio doméstico-privado y en el ámbito público.
- Salvaguardar activamente los derechos de las víctimas.
- Regular y reducir los disparadores del delito, como alcohol, drogas y armas, desde una perspectiva integral y de salud pública.
- Fortalecer los mecanismos de coordinación y evaluación de a cooperación internacional.